El río Segura nace en la Sierra que lleva su nombre, en una pequeña aldea llamada Fuente-Segura dentro del municipio de Santiago-Pontones en Jaén, donde se comen galianos, andrajos, caldo valiente o potaje de gurullos.
El agua discurre por Jaén, Albacete, Murcia y Alicante y desemboca en el Mediterráneo en Guardamar, tras recorrer 325 kilómetros.
El Segura se hace presente en Castilla-La Mancha dentro de su «curso alto», donde recibe agua de los ríos Madera, Zumeta y Tus y acumula sus aguas en los embalses de El Cenajo y la Fuensanta, pero también del «Curso Medio», en Castilla-La Mancha, recibe el agua del río Mundo que trae además la procedente de los trasvases del Tajo. 
De su paso por Castilla-La Mancha dejan constancia Yeste, Letúr, Elche de la Sierra, Férez, Socovos y Hellín.
El Segura es un río famoso por sus crecidas pero también por sus largos periodos de sequía. Ha sido el causante de situaciones muy dramáticas como la Riada de San Calixto en 1651 que causó 1.500 muertos en Murcia, o la de Santa Teresa en 1879 con 1.000 muertos y un caudal de 1.800 metros cúbicos por segundo. Pero también las hubo en 1946, 1948, 1973, 1982, y 1989. Por ello se canalizó la Vega Baja en el curso del río y así pudieron evitarse nuevas y peligrosas inundaciones en 1997, 2000 y 2012.
Dentro de nuestra región el Segura dispone de algunas infraestructuras. La primera se comienza a idear a finales del siglo XIX con el pantano de la Fuensanta. Ubicado en un paraje al que algunos conocían como el Estrecho del Infierno, al disponer de más de 100 metros de profundidad. Aunque fue construido en 1933 no se puso en funcionamiento hasta pasada la Guerra Civil.
La construcción del embalse de la Fuensanta privó de un camino 
vecinal a los habitantes de Yeste y sus pedanías. 74 años después, se ha construido un puente, llamado de la Vicaria que comunica Yeste con sus aldeas. Durante 74 años los vecinos han tenido que bordear el embalse en sus desplazamientos, algo para lo que se invertía en algunos casos hasta 50 minutos.
Pero el pantano más grande la cuenca del Segura es El Cenajo que además hace de frontera entre Albacete y Murcia. Está situado en el llamado Estrecho de la Herradura, una parte en Moratalla (Murcia) y el resto dividido entre Hellín, Socovos y Férez en Albacete.
Cuando se iniciaron las obras en 1943, se puso en marcha el Patronato de Redención de Penas por trabajo utilizada para los presos políticos de la época. La empresa solicitó reclusos para realizar estos trabajos. Fueron 350 los presos políticos y comunes, procedentes de la cárcel de Hellín y Las Minas, quienes llevaron en aquel momento los trabajos más arriesgados. En 1957 se puso en marcha el Destacamento del Penal del Cenajo, con la misma empresa que había llevado a cabo las obras de El Valle de los Caídos.
Fue inaugurado por Francisco Franco el 6 de junio de 1963, pero para darle una imagen más próspera se derivaron 100 metros cúbicos de agua de su embalse hermano La Fuensanta.
El río, con más o menos alegría avanza recién nacido y aprendiendo a caminar por Jaén. Se llena de alegría en Albacete con las aguas del río Mundo. Se ensancha en Murcia donde comienza a enfermar de contaminación y entra en Alicante herido por esta para morir en las playas del Mediterráneo, esquilmado además por la avaricia humana, pues siendo un río que necesita ayuda del hermano mayor Tajo, ve como año tras año aumenta la superficie de regadío sin ningún control a su alrededor.
P. Moratilla
Agua Luz y Viento 