Dentro de la comarca de Campo de Calatrava se encuentra Pozuelo de Calatrava. Un lugar que supo conseguir su independencia de Almagro durante la Edad Media y con una línea ascendente y mil vecinos más desde 1991. Actualmente son 3.443 los vecinos del lugar que se encuentran rodeados de una docena de volcanes. Entre ellos el llamado La Inesperada, con un diámetro de 1.166 metros y 40 de profundidad, con capacidad para la retención de agua lo que facilita la existencia de una laguna salada. Un lugar reconocido como Refugio de Caza, Zona de Especial Protección de las Aves, Refugio de Fauna, Reserva de la Biosfera de «la Mancha Húmeda», Reserva Natural e incluida en el Convenio Ramsar de Humedales de importancia Internacional.
Pero Pozuelo también tiene una obra inacabada, los Baños de la Fuensanta. Las cualidades de las aguas ferruginosas de la zona, llevaron a este lugar a ser muy conocido en la provincia de Ciudad Real. Cuentan que por sus efectos curativos, se llegó a embotellar y las gentes acudían sin reparo a un lugar completamente agreste para bañarse, rodeados de múltiples incomodidades. La afluencia era por cientos e incluso hay registros en los que se llegó a superar los 2.000 visitantes en un solo año. Esta circunstancia llevó a crear en 1750 un estanque cuadrado con cinco gradas, que facilitaran de alguna manera el baño. En 1.819 Carlos María Isidro de Borbón, manda iniciar las obras de un balneario en la zona.
Carlos María Isidro de Borbón era el hermano del rey Fernando VII, que había estado prisionero con toda su familia en Francia, durante la guerra de la Independencia. Fernando VII no tenía descendencia y Carlos se postulaba para la sucesión en el trono como Carlos V, hasta que nació Isabel (que reinaría después como Isabel II). Al morir Fernando, su hermano Carlos declara su ascensión al trono y se inicia la primera guerra carlista.
Todas las revueltas políticas surgidas en torno a este hecho, obligan a la paralización de la construcción del balneario de la Fuensanta en 1820. Aun así en 1821 se declaró la primera temporada de baños, pero pasó a manos privadas en 1855 mediante subasta. Actualmente siguen siendo propiedad privada.
Un proyecto que fue auspiciado por las gentes del lugar, apoyado por un monarca que no llegó a serlo y que nunca culminó sus obras debido a las disputas políticas entre hermanos primero y entre tío y sobrina después. De no haber sido así probablemente hoy Pozuelo estaría mucho más lejos turísticamente hablando.
P. Moratilla
Agua Luz y Viento 